
Santo Domingo.– Con un emotivo concierto en el Maunaloa Night Club & Casino, la cantante Zulinka Pérez, junto a su esposo Miguel Báez, presentó su nuevo proyecto musical, “Zulinka y Miguel”, que busca continuar el legado de su padre, el icónico Rubby Pérez, conocido como “La voz más alta del merengue”.
Visiblemente emocionada, Zulinka agradeció al público por su cálido recibimiento y destacó que, aunque este proyecto no estaba planeado, sentía que era una señal de Dios. «Gracias por ser partícipes de este nuevo proyecto. No lo teníamos planeado, pero Dios quiso que fuera así, y cuando Dios entrega algo, toca aceptarlo», expresó.
Zulinka, quien está consciente de la enorme responsabilidad que tiene al seguir los pasos de su padre, compartió que su mayor reto es subirse al escenario sin la presencia de Rubby Pérez, pero aseguró que su objetivo es mantener vivo su legado a través de la música. «El mayor reto es que no voy a tener a papi a mi lado. Él nos formó para ser líderes, y ahora mi compromiso es seguir adelante con su legado», añadió.
Por su parte, Miguel Báez, quien acompaña a Zulinka en esta nueva etapa, afirmó que esta gira representa mucho más que un espectáculo; es una promesa de continuidad para la música de su suegro, Rubby Pérez, y para el merengue que ha marcado generaciones.
La gira “Zulinka y Miguel” continuará en Venezuela con dos presentaciones especiales: el 13 de junio en el Hotel Hesperia de Valencia y el 14 de junio en el Poliedro de Caracas, como parte del evento Merengazo, donde se celebrará el ritmo y la herencia musical dominicana.